LAS PENURIAS DE LOS MERIDEÑOS
Giovanni Cegarra, GC. CNP. 2229
Gracias a la intolerancia e intransigencia de quienes están al frente del Sindicato del Transporte del Estado Mérida quienes han vivido, convivido del bolsillo del pueblo merideño y ahora lo quieren exprimir aún mas, a su antojo, los usuarios del servicio del transporte público pasan a diario, penurias, someten sus vidas al peligro y riesgo de sufrir un accidente, para poder llegar a tiempo a sus sitios de trabajo, lo que pareciera no importarle a las Autoridades Municipales Gubernamentales, que han dado claras muestras de falta de una decisión contundente al respecto.
A sol y agua, los merideños y los que no lo son, niños, jóvenes, adultos, de la tercera edad, cada día se las ingenian para cumplir con sus obligaciones sean escolares, laborales o personales, utilizando cualquier medio de transporte, exponiendo su humanidad a cualquier accidente, con riesgo y Dios no lo permita, de perder la vida, mientras los buseteros hacen de las suyas, sin son ni ton.
La situación es por demás delicada, preocupante, desesperante, para los cotidianos usuarios del transporte público, ya el servicio del Trolebús resulta insuficiente y en cualquier momento podría colapsar y ahí sí, ni para irse a llorar a El Valle porque como suben.
La sensatez, tolerancia, reflexión, entendimiento, debe prevalecer entre el Sindicato del Transporte y la Alcaldía del Municipio Libertador, en bien del colectivo merideño, es justo y necesario, solventar y evitar una desgracia a tiempo