El hampa tomó el mando en La Parroquia

Delincuencia implacable no da tregua
Agustín Volcanes
Fotos.AV
Los habitantes de este sector viven en una constante zozobra, al convertirse en presa fácil de la delincuencia que operan en el lugar por falta de vigilancia policial. Lo que antes era una zona de paz, tranquilidad y armonía ahora es una zona de alto peligro.
En La Parroquia y áreas circunvecinas está azotada por la delincuencia; por estas calles es un peligro alarmante transitar debido a que motochoro opera libremente en la referida zona.
El lugar está carcomido por malandros que a bordos de sus caballitos de aceros y portando armas, someten y robar a los transeúntes específicamente a las damas que van al trabajo, a clases o a llevar a su hijos a la escuela o al colegio.
La Parroquia que en los años noventa era todavía pulcra, y segura donde su habitantes se sentían seguros, ahora es otra cosa.
Los habitantes añoran la otrora tranquilidad de la zona. Cuando el sonido del río Aborregas era el protagonista. Este sonido continua pero de vez en cuando con ruidos de ametralla ya que los motochoros portan armas automáticas y hacen uso de ellas para amedrantar y atracar a los residentes de la zona.
Los habitantes y transeúntes manifestaron al equipo reporteril de este diario que exigen seguridad. “Queremos resguardo y seguridad para todos”, nos dijo uno de los entrevistados, la policía o cualquier otro organismo de seguridad tienen que actuar de una vez por todas, “no es posible que un par de pillos a bordo de una moto desde hace aproximadamente un año sigan cometiendo delitos y nadie le da un parao”.
Mientras los lugareños de la Parroquia, ven ya como si los garantes del orden se marcharon del lugar destacaron que no hay operativos policiales.
Aseguran que la Guardia Nacional Bolivariana, que anteriormente iba mucho a dar vueltas por esos lados, tienen que retomar estas acciones para ver si ponen tras las rejas a estos pillos que tienen azotada los habitantes de la Parroquia, en función de resguardar la integridad y la seguridad de la población.