Triple homicida se enconchó en Venezuela

El presunto autor del triple crimen de Usera (España) ocurrido el 22 de junio de 2016 fue detenido en octubre en Venezuela por la policía de este país. El arrestado, Dahud H. O., es un militar norteamericano de 51 años que supuestamente huyó a Venezuela tras el crimen y que actuó por despecho al enterarse de que su pareja tenía una relación sentimental con un abogado peruano que tenía un bufete en la calle de Marcelo Usera de Madrid, donde ocurrieron los tres asesinatos.
El diario El Mundo de España señaló que la Policía aguarda ahora la extradición para que sea juzgado.
El triple homicida fue detenido por la Policía venezolana durante otra operación de investigación que le relacionaba con otro delito. Una vez arrestado, se supo que tenía una orden internacional de búsqueda y captura por la Interpol.
Hace 15 días se les comunicó a los familiares de los tres fallecidos que había sido detenido y que se iban a poner en marcha todos los mecanismos legales para que sea juzgado en España.
La detención se produjo en Residencias el Yagual, de la avenida Paseo Caroní, en Ciudad Guayana. Se dijo que vivía con una hermana. Desde 2017 se presumía que podía estar en este país.
El supuesto criminal mandó dos días antes del triple asesinato un correo al dueño del despacho de abogados, Víctor Salas, en el que le amenazaba de muerte por tener relaciones con su esposa, una alemana.
“De todas las mujeres que había en el mundo has tenido que elegir a la mía. Te voy a matar”, decía el correo que el detenido envío al propietario del bufete. Éste aceptó el reto y le dijo que le esperaba. Dos días más tarde el militar viajó a Madrid para matar a Víctor. El hombre llegó al despacho y preguntó por Víctor.
El militar mató primero con un machete a la abogada del bufete Elisa Consuegra, de 31 años. La apuñaló en el tórax. Luego, acabó con la vida de la secretaria, Maritza O. R., de 46 años, cuando esta se dio cuenta de que había matado a su compañera.
Se cree que el asesino se quedó esperando al dueño. A las 5:00 pm entró en el bufete Pepe C. V., un taxista ecuatoriano que fue a arreglar unos papeles. El homicida creyó en ese momento que estaba entrando por la puerta el abogado Salas y al pasar le mató de varios golpes en la cabeza. El supuesto asesino prendió fuego al despacho intentando destruir las pruebas.