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PDVSA: Crónica de una muerte anunciada

En octubre del 2019, Léster Rodríguez, ex alcalde del municipio Libertador, con amplia experiencia en el área de Petróleo que le ha valido el Reconocimiento a la excelencia PDVSA-CIED 1998. Coordinador de la Escuela de formación de Ingenieros de Procesos del CRP y asesor del grupo de Ingeniería de Procesos de la refinería de Amuay en la década del 90. Profesor Titular de la Escuela de Ingeniería Química y ex Rector de la ULA, informó acerca de la situación de PDVSA, en rueda de prensa del Frente Amplio Merideño, con ocasión del grave problema que se registra por la escasez de gasolina en el estado Mérida y hoy en todo el país. MÉRIDA DIGITAL decide reproducir la información del experto para que los ciudadanos comprendan el porqué hoy, no hay gasolina en el país.

Tal y como lo dijimos en la rueda de prensa anterior, cuando comenzó ésta situación de la escasez de gasolina en el estado y los miembros del gobierno anunciaban que el problema estaba bajo control, que lo resolverían pronto, y le anunciamos a los merideños que el problema era estructural, de mala gerencia, de falta de inversión en el sector y que se agravaría como en efecto lo estamos viendo y padeciendo desde hace varias semanas.

Poner gasolina en Mérida es una humillación para el gentilicio merideño, por los días invertidos en largas colas, y por la pérdida no solo del tiempo improductivo invertido, sino por la pérdida de alimentos y productos perecederos que no se pueden transportar por falta de combustible. Es humillante ver monumentales colas de autobuses y vehículos de todo tipo, que han convertido a la ciudad y al estado en un estacionamiento gigantesco.

Origen del problema

En la década del 90 la capacidad de refinación total, país más exterior, estaba por el orden de los tres millones de barriles diarios y se exportaba gasolina, Diesel y aceite de calefacción a la costa este de los Estados Unidos.

Se constituyeron plantas de MTBE y TAME para producir los aditivos necesarios, oxigenados, para no depender de la compra de estos aditivos en el exterior y cumplir con el acta de aire limpio de USA, a quien como ya dijo, se le vendía gasolina, sustituyendo el tetraetilo de plomo que se usaba en el país por estos componentes. 

La capacidad instalada de refinación en el país está en los 1.330.000 BBL/día en seis refinerías.

Hoy, producto de la falta de formación profesional, los bajos sueldos, la falta de mantenimiento y de gerencia, la producción petrolera ha ido en declive constante, hasta llegar en el mes de octubre a unos 711.000 BBL/día, las refinerías se han descuidado mucho  y su capacidad de procesamiento disminuyó al 10% de su capacidad instalada y no se puede satisfacer el mercado interno.

Un dato importante ha sido el declive  en el consumo de gasolina que en 2012 era de 300.000 BBL/día, en el 2017 de 175.000, en el 2018 de 160.000 y en el 2019 al mes de octubre es de 130.000 BBL/día.

Este comportamiento es totalmente atípico, debido a que para el desarrollo del país se requiere que el consumo aumente, como había sido antes de la revolución bolivariana. A manera de ejemplo se puede puntualizar que, para el 2012 el parque automotor estaba en 5,1 millones de vehículos y en el 2019 bajó a 3,5 millones. 

Para cubrir esta demanda el CRP produce 50.000 BBL/día, se importan 45.000 y se fugan por contrabando y acuerdos 25.000, existiendo un déficit de 60.000 BBL/día.

De los 70.000 BBL/día disponibles, 35.000 se quedan en la Gran Caracas y sus alrededores y los otros 35.000 se distribuyen en el interior.

La solución para cubrir este déficit, en la emergencia, va en dos sentidos: minimizar el contrabando, o eliminarlo que es lo ideal, revisar los acuerdos, y hacer esfuerzos financieros para comprar los 35.000 BBL/día adicionales, que representan un promedio de 3.080.000 dólares diarios adicionales colocando un precio promedio de 55 centavos de dólar por litro.

Mientras esto no se haga, el problema de la escasez de gasolina en el interior, sobre todo en la región andina y el Zulia, continuará y se agravará con el tiempo.

Solución a mediano plazo

La solución a mediano y largo plazo es recuperar la producción en la faja Hugo Rafael Chávez Frías hasta un millón de barriles diarios, invertir en recuperación secundaria y terciaria en los 20.000 pozos marginales de crudo mediano en el occidente y en el oriente del país, contratar y operar con eficiencia más taladros de perforación, realizar, mantenimiento mayor y menor a las refinerías y plantas petroquímicas, gerenciar la industria como una empresa, no como una agencia de empleos del PSUV, pagar mejores salarios, beneficios habitacionales y de comisariato, a todos sus trabajadores con estándares de contratación internacionales.

Eliminar el descuento en la venta de petróleo a CITGO, salir de la deuda de 7 mil millones de dólares adquirida por malas decisiones de expropiación y por endeudamiento por falta de recursos para la República, salir de compromisos adquiridos en el exterior que han sido un mal negocio para la empresa y sobretodo, resolver el problema político entre el gobierno y la oposición para poder enrumbar al país y a la empresa por el camino del desarrollo. 

Léster Rodríguez Herrera
Mérida, 31-10-2019