¿Qué hacer para levantarte más motivado todas las mañanas?
Edith Gomez
Todas las personas tenemos rutinas diferentes, depende de sus responsabilidades y más que todo, del estilo de vida de cada quien. Hay algunos que comienzan sus rutinas cuando se levanta el sol mientras otras son un poco más flexibles en cuanto a su horario cotidiano. Todo es válido.
El problema comienza cuando necesitas pararte temprano porque tu rutina ha cambiado y esto se convierte en una tarea titánica para ti. Es cierto que no todos somos personas mañaneras, de esas que hacen estas rutinas de productividad de Gananci al inicio del día. Pero también es cierto que cuando se tiene una responsabilidad, hay que cumplirla más allá de si esto nos agrada o no.
Si estás sufriendo todos los días para poder levantarte no estás comenzando tu rutina de la manera más óptima. Para ti que deseas cambiar esto, sigue leyendo porque encontrarás algunas recomendaciones para acabar con esa tortura diaria.
-Revisa las causas: no es normal que si te debes despertar todos los días a la misma hora te siga costando. Si hubo un cambio de rutina, las primeras semanas lo más probable es que cueste la adaptación, pero luego debería hacerse más fácil porque el cuerpo se acostumbra. Si esto no te ha pasado es porque debe haber otras causas que no te están permitiendo lograrlo.
Haz una autoevaluación y piensa concienzudamente cuál podría ser la causa. Quizá al sitio donde vas luego de levantarte no te motiva a hacerlo, estás durmiendo muy pocas horas, la cama donde descansas no permite que te sientas a gusto, hay ruidos cercanos a tu habitación, y más. Las causas podrían ser diversas.
-Toma acciones: si logras identificar la causa, trata de hacer algo para que esto no siga ocurriendo. El sueño es una de las actividades más importantes para que el organismo se encuentre saludable y pueda funcionar debidamente.
Si el problema es tu trabajo, y estás pensando si debes renunciar o no, descubre algunas razones por las cuales ya tu trabajo no puede darte la satisfacción que estás buscando y por qué vale la pena arriesgarse a tomar nuevos rumbos.
Si no logras identificar la causa, prueba los siguientes tips que también podrían ayudarte a combatir el síntoma, más no el problema de raíz:
- Toma un baño antes de dormir: cuando estás limpio y fresco el descanso se hará mucho más placentero. Además, podrás conciliar el sueño mucho más rápido porque tomar un baño también ayuda a los músculos a relajarse luego de un largo día.
- Prefiere las comidas ligeras par de horas antes de irte a la cama: cuando estás haciendo el proceso de digestión, los esfuerzos del organismo, el oxígeno y la sangre se centran en el sistema que lo realiza. Por eso es normal que nos dé un poco de sueño luego de comer, sin embargo, ingerir grandes cantidades de alimento no es una buena idea cercano a la hora de descansar ya que la pesadez puede jugar en tu contra.
Para la cena escoge alimentos ligeros, preferiblemente bajos en calorías y grasas, así tu cuerpo podrá hacer la digestión de manera más sencilla y luego descansar como Dios manda. De esta manera, cuando el despertador suene, ya habrás disfrutado de un sueño reparador.
- Párate apenas escuches la alarma: mientras más largas le des al asunto más te va a costar despegarte de los brazos de Morfeo así que para levantarte con buena energía y con el pie derecho, hazlo de una buena vez en vez de quedarte en cama a luchar con el sueño y posponer mil veces la alarma.
- No duermas con el teléfono cerca de tu cama: muchas personas cuando despiertan a mitad de la noche, toman su teléfono para ver videos, leer y pasar el rato, esto hace que se mantenga el insomnio. Lo preferible es tener los dispositivos móviles alejados de la cama para tener un sueño más reparador que tampoco se vea interrumpido por notificaciones, luces, sonidos y más.
Por otro lado, esto también te va a ayudar si en las mañanas usas la alarma del teléfono, ya que estando lejos de tu alcance no podrías posponerla, sino que debes pararte a apagarla para que esta deje de sonar.
También sirve que medites en la noche lo que quieres realizar al día siguiente, medita lo que harás a cada hora del día, empezando desde temprano, así irás poco a poco programando tu cerebro para que trabaje a tu favor. Además, puedes consumir abundantes frutas y verduras en forma natural o zumo, así tendrás suficiente energía para gastar durante el día y luego dormir el cansancio en las noches.