Alcides Monsalve advierte sobre la crisis económica que asfixia a Mérida

El exalcalde y dirigente político alerta sobre el grave deterioro del poder adquisitivo de los merideños y advierte que la fragmentación democrática podría allanar el camino a un modelo centralizador que «destruiría la autonomía, la dignidad y la democracia», llamando a la acción unitaria de cara a una «cita decisiva» el próximo 25 de mayo.
Mérida.- El pulso económico de Mérida preocupa al dirigente político y exalcalde de la ciudad, Alcides Monsalve, quien este viernes alzó su voz para dibujar un panorama de grave deterioro que, según su análisis, golpea sin piedad el bolsillo de los ciudadanos. La creciente inflación, los aumentos en las tarifas del transporte público, frente a los bajos salarios del resto de la población. Además del pago del cesta ticket a empleados públicos a una tasa inferior al dólar oficial, son elementos de una realidad que dificulta cada día más la subsistencia de los trabajadores.
Monsalve no solo diagnosticó la situación actual, sino que lanzó una seria advertencia sobre el futuro. Según el dirigente, esta compleja realidad podría agudizarse drásticamente si se concreta la implementación del llamado Estado Comunal impulsado por el gobierno central. “Hoy los merideños vemos cómo cada día es más difícil llegar a fin de mes. Aumentan los precios, suben los pasajes, pero los sueldos y beneficios siguen devaluados”, expresó Monsalve, cuestionando de inmediato: “¿Qué pasará si dejamos que nos impongan un Estado Comunal que destruiría aún más lo poco que nos queda de autonomía, de dignidad y de democracia?”.
La amenaza del modelo centralizador
El foco de la preocupación de Monsalve se centra en el proyecto de Estado Comunal. Para el exalcalde, este modelo representa mucho más que una simple reestructuración administrativa; lo define como un mecanismo de «control político, más pobreza y menos libertades».
En su intervención, Monsalve fue enfático al señalar que un factor crucial que podría facilitar el avance de este modelo centralizador en Mérida es la división persistente entre los distintos factores democráticos de la región. «Si no votamos masivamente, si nos dividimos, si no entendemos el momento histórico que vivimos, seremos los mismos merideños quienes abramos la puerta a la pérdida de nuestros derechos», subrayó con firmeza.
El llamado a la unidad y la cita con el futuro
Ante este escenario que califica de riesgo, Alcides Monsalve dirigió un llamado directo a la ciudadanía, instándoles a reflexionar sobre las potenciales consecuencias de la indiferencia y la fragmentación política. La responsabilidad recae, a su juicio, en la capacidad de los merideños para articular una respuesta unida y contundente.
El dirigente fijó la fecha del 25 de mayo como un momento clave, una «cita decisiva con el futuro de Mérida». Enfatizó la importancia de la participación ciudadana, afirmando que «cada voto contará» en el esfuerzo por evitar que «el futuro de nuestros hijos quede atrapado en un sistema que solamente genera miseria». La inacción no es una opción, según Monsalve: «No podemos ser cómplices por omisión. Es tiempo de unidad, de compromiso y de acción”, puntualizó.
Alcides Monsalve concluyó su pronunciamiento reiterando su visión para el estado Mérida, una tierra que, a su entender, merece un gobierno que respete sus arraigadas tradiciones democráticas, impulse la productividad, garantice el trabajo digno y, sobre todo, la libertad. «Mérida no nació para ser sometida, nació para ser libre», sentenció, encapsulando así su mensaje central sobre la necesidad de defender los valores democráticos y la autonomía frente a las amenazas económicas y políticas que, a su juicio, se ciernen sobre la región andina.
Prensa CC – Fuerzas Democráticas Unidas