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La escasez de agua convierte a los hospitales de Caracas en focos de infección

por Redacción @cronicauno

Cinco de los hospitales operan sin suministro de agua potable continuo. El problema, que obliga a los familiares a cargar botellones, compromete la esterilización de equipos y aumenta el riesgo de infecciones, lo cual viola el derecho fundamental a la salud.

Caracas.– Cinco hospitales en Caracas operan con un servicio de agua intermitente. El suministro en algunos de ellos cubre unas pocas horas al día. Y aunque algunos centros de salud públicos cuentan con tanques de almacenamiento en algunos pisos, los riesgos de contaminación persisten.

La falta de agua en el Pérez Carreño, el Vargas y los Magallanes de Catia obliga a los familiares a cargar botellones desde la calle o buscar fuentes alternativas.

En los pasillos del Hospital Vargas la escasez de agua no solo afecta a los baños. También la precariedad llegó al Servicio de Diálisis, cuyo funcionamiento diario depende de este suministro para garantizar el tratamiento a los pacientes renales.

“Muchas veces hay consultas que se suspenden por la falta de agua y lo peor es que el número de pacientes crece”, lamentó una enfermera del hospital.

En el hospital Vargas de Caracas no hay por tubería desde hace un año. / Foto: Crónica Uno

Esterilización

Un experto en salud pública consultado por Crónica Uno, quien prefirió el anonimato por motivos de seguridad, advierte que la escasez y la deficiente calidad del agua afectan directamente la esterilización de los equipos quirúrgicos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) subraya que el acceso al agua segura en los hospitales es fundamental para la prevención de infecciones asociadas a la atención médica y la higiene de pacientes y personal.

Según la organización 25 % de los centros de salud en el mundo no tienen acceso a servicios de agua gestionados de manera segura, lo que pone en riesgo procedimientos vitales como cirugías, partos o el tratamiento de heridas.

El especialista explica que el sistema de esterilización hospitalario se rige por dos principios: primero el personal debe lavar los instrumentos con agua y soluciones especiales. Después ponen estos equipos en sistemas que trabajan a vapor y presión atmosférica para completar el proceso.

La falta de agua empeora el mal estado de los baños. Foto: Crónica Uno

Añade que en condiciones normales los hospitales deberían limpiar los pisos entre seis y 10 veces al día, con cada cambio de turno ‒mañana, mediodía, tarde y noche‒, para mantener las instalaciones desinfectadas. Para ello se requiere agua así como los productos de limpieza adecuados.

“Sin embargo, en los hospitales el agua no llega las 24 horas del día ni los 365 días del año, lo que afecta el aseo y limpieza de las instalaciones sanitarias, hospitales o ambulatorios, lo que podría generar graves consecuencias en la salud de los pacientes”,afirma. 

Agrega que desde la pandemia de COVID-19 el suministro de agua en los centros de salud pública es muy irregular, bien sea por fallas en el bombeo o en el deterioro de las tuberías.

Vulneración al derecho a la salud

El experto señala que la falta de agua potable en los hospitales no es solo un indicador de la crisis de servicios públicos; es una clara violación a los derechos fundamentales de los venezolanos, en especial el derecho a la salud. “En la práctica, el paciente venezolano no solo debe luchar contra su enfermedad, sino también contra las carencias del sistema, lo que configura una doble vulnerabilidad”.

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en su artículo 83, establece que la salud es un derecho social fundamental y una obligación del Estado, garantizada como parte del derecho a la vida.

La falta de agua obliga a los familiares a comprarla o llevarla desde su casa. / Foto: Crónica Uno